La Asociación VIVA ha sido galardonada con el tercer premio en la incubadora de emprendimiento social Ashoka Changemakers, líder en España y a nivel mundial. En este caso hemos participado en la modalidad estatal qué abarca proyectos a nivel de España.
Gracias a Irene Milleiro, directora de Asoka España, también a todo su equipo así como a BridgeforBillions y al de Ikea España. Además de a todas estas empresas y entidades sociales queremos expresar nuestro más sincero y cariñoso agradecimiento. Han sido cinco meses inolvidables y sobre todo un paso muy importante en la consecución de nuestro objetivo como empresa social. ¡Nunca os olvidaremos, seguimos unidos para siempre!
Desde que comenzamos hace ya cuatro años nuestra andadura con el proyecto VIVA, quisimos dar importancia y visibilidad tanto al proyecto como a nuestra historia personal y así ganar fuerza para obtener una doble e importante victoria, que se reconozca la importancia de vivir de forma independiente y de que nadie se sienta apartado/a por el hecho de tener una orientación sexual diferente a la mayoría.
Hemos preparado para ti la siguiente encuesta sobre vivienda de alquiler y accesibilidad económica y arquitectónica, dentro de la incubadora de emprendimiento social Ashoka Changemakers, con motivo de conocer mejor las preferencias de nuestros futuros clientes o mejor como a nosotros nos gusta decir compañer@s que nos acompañarán en la aventura de vivir de forma independiente, viviendo como nosotr@s queremos vivir.
Nuestra asociación ha sido seleccionada recientemente para participar en un programa de emprendimiento social del cual formamos parte desde el pasado mes de abril, momento en el que se inició este programa de incubación para empresas sociales.
Por esta razón quizás últimamente nos habéis visto menos activos en redes sociales, ya nos contaremos nuestra novedades con respecto a esta noticia.
En esta entrevista de Onda Cero Cáceres del 1 de abril de 2024, hablamos de nuestro proyecto, de nuestros progresos. Esperemos que muy pronto os podamos contar más avances.
Lo que nos mueve es el compromiso con nosotros mismos y con los demás. VIVA es una ONG en la que cada una de las personas a las asesoramos y apoyamos se convierte en nuestro mayor aliciente y motivación, una continua fuente de energía puesta al servicio de las personas con diversidad funcional porque liderar tu vida, construir, dirigir y protagonizarla en primera persona para alcanzar tus metas y cumplir tus sueños es mucho más que un derecho, es una necesidad básica.
Nuestras principales líneas de trabajo son cuatro: Asistencia personal digna, Vivienda accesible / asequible y Empleabilidad.
Compartimos, en todos los sentidos, estas palabras de uno de los impulsores de la vida independiente en Europa. Primero unos datos para que le conozcáis un poco mejor.
Muchos creen que necesitamos un cuidado especial, tierno y amoroso por parte de muchas personas con batas blancas. Cuanto más discapacitados somos, más enfermos estamos ante los ojos de nuestro entorno y más formación profesional necesitan las personas que tienen a su cargo la tarea de cuidarnos. De esta manera, la sociedad ha entregado a los profesionales el control de nuestras vidas. Muchos de nosotros hemos sido criados con la creencia de que un médico o un trabajador social es el mejor calificado para tomar decisiones sobre nuestras vidas. Cuanto más poder atribuimos a la persona de la bata blanca, menos creemos en nuestra propia fuerza. Es hora de que lleguemos a una evaluación realista de lo que otras personas pueden hacer por nosotros y de lo que podemos hacer nosotros por nosotros mismos. Es hora de que recuperemos el poder que hemos entregado a los profesionales.
Los servicios, como el transporte o la asistencia, suelen estar diseñados, controlados y gestionados por profesionales no discapacitados. Estas personas, por muy bien intencionadas que sean, simplemente no pueden comprender nuestras necesidades, estilos de vida y aspiraciones como nosotros. Como resultado, vemos sistemas de paratránsito que funcionan de lunes a viernes, como si no tuviéramos necesidad de salir de casa los fines de semana. Vemos esquemas de asistencia personal que brindan servicios solo dentro de los límites políticos de nuestras comunidades, como si nunca tuviéramos la necesidad de cruzar los límites de la ciudad. Si dejamos el diseño y el control de dichos servicios a otras personas, no debería sorprendernos que presenten soluciones que se ajusten a las necesidades de sus burocracias existentes en lugar de a las nuestras.
Según el artículo 19 de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, como el resto, las personas con diversidad funcional deben tener la oportunidad de elegir su lugar de residencia y dónde y con quién vivir, en igualdad de condiciones con las demás, y no se vean obligadas a vivir con arreglo a un sistema de vida específico, así como el acceso a una variedad de servicios de asistencia domiciliaria, incluida la asistencia personal que sea necesaria para facilitar su existencia y su inclusión en la comunidad y para evitar su aislamiento o separación de ésta. Es decir, tenemos el derecho a vivir de forma independiente y a ser incluidas en la comunidad. Y nada mejor que la Asistencia Personal para ejercer ese legítimo derecho, que descompuesto en aquello que implica, abarca la totalidad de los aspectos de la vida diaria.
La Asistencia Personal es una herramienta de incidencia transversal, garante de Derechos Humanos.
Os compartimos un artículo de nuestros compañeros Mamen y Juanjo en el que reivindican junto con nuestra asociación VIVA que la asistencia personal y la vida independiente en Extremadura para que nuestra región sea más abierta, justa, equitativa y se ajuste a las directivas y políticas europeas en material de diversidad funcional. Ellos y nosotros solo queremos dejar de sobrevivir para empezar a vivir con dignidad.
Un gobierno supuestamente progresista blanqueando, justificando, alentando y fomentando el incumplimiento sistemático de los derechos humanos, es decir la institucionalización, pero eso sí según Sánchez nuestra economía va bien, estamos en un “estado del bienestar” debe de ser ese el concepto que nuestro todavía presidente tiene, hacer residencias divinas, esplendorosas y “cuquis”, o sea caca con purpurina, pero igual de sucia y mal oliente.